Un operativo del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) en Chicago ha sacudido a una comunidad de jardineros, dejándolos sobrevivientes de una experiencia traumática.
La historia se centra en Rey, un trabajador inmigrante que fue secuestrado por agentes de ICE mientras limpiaba un jardín en Rogers Park. La noticia se propagó rápidamente, y su jefa, Kristen Hulne, recibió una llamada de un hombre diciendo "ICE acaba de llevarse a Rey". La reacción fue inmediata, con el concejal del vecindario movilizando a los empleados de Patch Landscaping para defender a sus compañeros de trabajo.
La guerra contra los inmigrantes en el país se ha vuelto cada vez más complicada para los jardineros, quienes intentan equilibrar su vida laboral con la presión creciente de una persecución que puede llevar a arrestos y deportación. "Es un juego del gato y el ratón", dice Hulne, quien añade que el reciente retiro del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas es un consuelo limitado.
Las víctimas de estos operativos suelen ser trabajadores inmigrantes sin antecedentes penales, quienes solo buscan ganar un salario para apoyar a sus familias. Como dijo Hulne, "No tiene antecedentes penales. Ni siquiera una multa de estacionamiento. Ni siquiera dice malas palabras. Es un buen hombre, acusado del crimen de trabajar".
La comunidad de jardineros ha respondido con solidaridad, organizándose para proteger a sus compañeros de trabajo y apoyar a aquellos que han sido afectados por la persecución. La lucha de estos trabajadores es un recordatorio de que la justicia y la equidad deben ser prioritarias en nuestra sociedad.
El caso de Rey es solo uno de muchos ejemplos de cómo el gobierno federal está utilizando a los agentes de ICE para perseguir a personas inocentes. Como dijo Hulne, "Es como vivir en Rusia". La comunidad de jardineros en Chicago está unida en su rechazo a esta política represiva y está luchando por garantizar que sus empleados sean protegidos de la persecución.
La situación es cada vez más crítica, y es importante que los líderes políticos y la sociedad en general den prioridad a la justicia y la equidad para todos los trabajadores, sin importar su estado migratorio.
La historia se centra en Rey, un trabajador inmigrante que fue secuestrado por agentes de ICE mientras limpiaba un jardín en Rogers Park. La noticia se propagó rápidamente, y su jefa, Kristen Hulne, recibió una llamada de un hombre diciendo "ICE acaba de llevarse a Rey". La reacción fue inmediata, con el concejal del vecindario movilizando a los empleados de Patch Landscaping para defender a sus compañeros de trabajo.
La guerra contra los inmigrantes en el país se ha vuelto cada vez más complicada para los jardineros, quienes intentan equilibrar su vida laboral con la presión creciente de una persecución que puede llevar a arrestos y deportación. "Es un juego del gato y el ratón", dice Hulne, quien añade que el reciente retiro del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas es un consuelo limitado.
Las víctimas de estos operativos suelen ser trabajadores inmigrantes sin antecedentes penales, quienes solo buscan ganar un salario para apoyar a sus familias. Como dijo Hulne, "No tiene antecedentes penales. Ni siquiera una multa de estacionamiento. Ni siquiera dice malas palabras. Es un buen hombre, acusado del crimen de trabajar".
La comunidad de jardineros ha respondido con solidaridad, organizándose para proteger a sus compañeros de trabajo y apoyar a aquellos que han sido afectados por la persecución. La lucha de estos trabajadores es un recordatorio de que la justicia y la equidad deben ser prioritarias en nuestra sociedad.
El caso de Rey es solo uno de muchos ejemplos de cómo el gobierno federal está utilizando a los agentes de ICE para perseguir a personas inocentes. Como dijo Hulne, "Es como vivir en Rusia". La comunidad de jardineros en Chicago está unida en su rechazo a esta política represiva y está luchando por garantizar que sus empleados sean protegidos de la persecución.
La situación es cada vez más crítica, y es importante que los líderes políticos y la sociedad en general den prioridad a la justicia y la equidad para todos los trabajadores, sin importar su estado migratorio.